Consigue que tus hijos sean responsables con los animales
Los animales, sean de la especie que sean, son seres que merecen nuestro cuidado y cariño y merecen ser tratados por todos de forma correcta, para que puedan llevar una vida digna, tal y como se merecen.
A los niños desde bien pequeño hay que enseñarles a que respeten y traten como se merecen a los animales. De los animales obtenemos mucho, entre otras cosas, valores como el respeto, el amor (sólo hay que ver cómo nos quieren nuestras mascotas y cómo nos reciben cuando nos ven) y de nuestras mascotas aprendemos además de esas cosas, otras muchas, como la fidelidad y el sentido de la responsabilidad. A los animales en general y a nuestras macotas en particular tenemos que brindarles un cuidado, una atención y un cariño a diario, ya que no sólo lo necesitan sino que también nos lo devuelven. Y ese cariño, atención y cuidados que le damos a nuestras mascotas y a los animales en general, se lo tenemos que transmitir a nuestros hijos para que ellos adquieran desde bien pequeños los valores del respeto hacia los animales.
Hay que tener en cuenta que los padres son el mejor espejo para sus hijos y estos absorben como auténticas esponjas los comportamientos que ven en sus padres y probablemente luego reproduzcan esos comportamientos.
En muchas ocasiones se observan comportamientos en los niños, sobre todo en los más pequeños, con los animales que no son del todo buenas para los animales. Por ejemplo con los perros o gatos muchos niños les tiran del rabo, de las orejas, los cogen de malas maneras, etc. no es culpa de ellos, ya que son niños y para la mayoría de ellos los animales son como peluches de los que ven en la tele o como los que tiene para jugar y a lo mejor puede ocurrir una desgracia y que en uno de esos comportamientos, uno de esos animales reaccione mal. Por ello desde bien pequeños a los niños ya hay que ensenarles y fomentarles el cuidado y el respeto hacia los animales, para que desarrollen desde sus inicios esos valores.
En el caso de que tengas una mascota en casa que conviva también con tu hijo también puedes aprovechar para que a través del cuidado al animal el niño también interiorice el sentido de la responsabilidad. Con la convivencia con el animal el niño aprende a que hay que proporcionarle unos cuidados y una atención, darle de comer, pasearlo si es un perro, prepararle un sitio donde dormir y tenerlo limpio, con el caso de los peces o la tortuga marina, cuidarle el agua (cloro y ph) etc. Si involucras al niño en estas acciones el niño empezará a interiorizar el sentido de la responsabilidad, para luego ir desarrollándose a lo largo de su vida, además de interiorizar el respeto y el amor por los animales.
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